12.1.10

(...)


Ando como una mosca insistente, rebotando en tus ojos,
buscando algo de aire o algo de día tal vez.
No culpo tu cabello, pero algo tiene que ver contigo y conmigo,
al igual que tus adornos, al igual que tu perfume, al igual que las hojas que te guindan.
Bien plantada, bien parada frente a mi y ahora que te veo hago mal uso de mi lengua.
Estoy de pie en mundos indecentes, me sorprende tanta brillantez, tanta candidez, tanta cercanía y tanta distancia.
Tanto... tanto que opto por recostar mi silla a la pared y ver como todo pasa.

No hay comentarios: