24.1.12

Disperso infinitivo.


Irse descolocado libando las botellas de la mesa eterna del bar;
Sacrificar un día comedido por un día desmedido;
Caer, no al primer contacto con la seda robusta de la realidad,
sino con el sabio rostro de la imaginación.
Despegar del caudal sumiso entre la jungla;
Agonizar cegando los oídos y haciendo la vista sorda;
Voltear el rostro para no indagar sobre ese lado oscuro del corazón,
sino incinerarse y enterrarse y creerse vivo en aquel lugar.
Seguir jugando, no para vivir, ni para soñar, sino para sentir.

Fondo de tus días.


Seguirte insistente hasta el fondo de tus piernas,
Hallarte entera en el roce de los cuerpos.
Perseguirte en el diluvio de las manos con mi esqueleto tan descuidado,
Hallarte consumida en el pestañeo del sol.